GNOCCHI AL HORNO CON CREMA DE CALABAZA Y ESPINACAS

¡Amantes de las recetas sencillas y deliciosas estáis de enhorabuena! Os traigo la receta de gnocchi definitiva para disfrutar de un buen plato de pasta sin complicaciones y con un sabor tan rico que os vais a pelear por lo que quede en la cazuela, así que os aviso, llenar bien el plato, que igual cuando queráis repetir, no queda nada.

INGREDIENTES

200 gr de gnocchi (caseros o comerciales de calidad)

400 gr. de puré de calabaza (explico la preparación al final)

Un manojo de espinacas.

100 gr de nata espesa o creme fraiche.

2 dientes de ajo.

Tomillo fresco.

Una pizca de guindilla picada o en polvo.

Queso gruyere rallado.

Queso parmesano en polvo

Sal y pimenta al gusto.

1. Cocemos los gnocchi en abundante agua hirviendo hasta que comiencen a flotar o seguimos las instrucciones del fabricante. Una vez listos los escurrimos.
2. En un cuenco grande mezclamos el puré de calabaza con la nata y las especias. Una vez que tengamos un puré homogéneo añadimos el queso gruyere, las espinacas y los gnocchi. Mezclamos bien.
3. En una bandeja para horno, vertemos los gnocchi y espolvoreamos con el parmesano en polvo al gusto. Gratinamos a 180ºC unos 15 minutos o hasta que veamos que comienzan a dorarse. Servimos al momento.

Sencillo, verdad? Pues os aseguro que es una delicia, tanto, que a lo próximos invitados que tenga en casa ya se pueden imaginar lo que van a comer. Servidos con una buena copa de vino tinto, tendremos una jornada otoñal de lo más acogedora, con una pequeña tabla de quesos de entrante, tendremos una comida realmente deliciosa.

El puré de calabaza. Hay varias maneras de prepararlo a cual más sencilla. Lo primero pelar y trocear la calabaza. Lo podemos hacer al horno, con un chorrito de aceite y especias al gusto, lo único que tendremos que llevar cuidado de no asar demasiado la calabaza, o los bordes quedarán algo quemados. Una vez fría, chafamos con un tenedor y listo. La segunda manera sería cocerla hasta que esté tierna, lo único que es que cogerá un poco de agua y el puré quedará mas líquido, lo podemos solucionar dejándola en un escurridor por un par de horas y luego simplemente chafar. Y mi forma favorita, al vapor, se hace en nada y mantiene por completo su sabor y textura, una delicia.

Una vez que chafo la calabaza para el puré, le suelo añadir sal, pimienta y un poco de nuez moscada y os puedo decir que casi me lo comería a cucharadas tal cual. Intentar preparar de más, luego viene genial para otros platos, como rellenar pasta fresca, espesar caldos o añadir al hummus, le aporta un toque untuoso increíble.

En cuanto a los gnocchi, los podéis preparar caseros, os dejo AQUÍ la receta, o si andáis con poco tiempo los podéis comprar, eso si, una marca que sea de calidad, o el resultado del plato no será tan bueno como esperas. 

Importante el toque picante y especiado en el plato, de por sí la calabaza es muy suave, con lo que el ese toque picante de la guindilla le va de maravilla, eso sí, controlar bien al hacer la mezcla del puré con la nata, que de pasarnos puede resultar incómodo de comer.

Poco más que decir de esta delicia, que espero que os animéis a prepararlo, os aseguro que os va a encantar.