Hoy os traigo una receta super fácil y sencilla, de esas que ya invitan a la llegada del buen tiempo y las comidas más ligeras y refrescantes. Y creo que con eso lo he dico todo, fácil y delicioso, quién quiere más? Nada más irresistible que un buen pesto casero, y este tiene el plus de que está tan rico que te lo puedes comer a cucharadas, como me oyes, así que he duplicado cantidades y esta semana lo usaré en varias preparaciones.
INGREDIENTES
100 gr. de brócoli.
1 diente de ajo.
50 gr. de parmesano.
20 gr. de hojas de albahaca frescas.
20 gr. de piñones.
30 gr. de pistachos.
1 pizca de sal.
50 ml. de aceite de oliva.
- Lavamos y troceamos el brócoli. Lo ponemos en un cazo con abundante agua caliente y lo cocemos durante 10 min. Lo escurrimos, pasamos por agua fría y dejamos enfriar.
- En un robot de cocina o procesador de alimentos añadimos el ajo, el parmesano, los frutos secos, la sal y la albahaca. Picamos bien. A continuación añadimos el brócoli y volvemos a triturar ligeramente.
- Añadimos el aceite de oliva y seguimos batiendo a golpes cortos para que se amalgamen bien todos los ingredientes y el aceite emulsione un poco. Listo para tomar.
¡No me digáis que no es sencillo! el brócoli le aporta un toque de suavidad que lo hace ideal para tomarlo como paté con un poco de pan, incluso como base par aun sándwich o como aliño para una ensalada, queda genial y nos va a sacar de más de un apuro, yo intento tener siempre un bote de pesto casero en la nevera.
En esta ocasión lo vamos a tomar con pasta, que realmente es como más me gusta, pero como os decía, he duplicado cantidades para que salga bastante cantidad y poder guardar, incluso congelar en cubiteras, de esa forma tendremos pequeñas raciones de pesto siempre que lo necesitemos.
Esta receta la he cogido de mi amiga Belén de Cupcakes a gogo, así que corriendo todos a ver sus marvillosas recetas, que os van a encantar! Espero que os animéis a prepararlo, os va a encantar seguro.
0 comentarios:
Publicar un comentario