MEJILLONES A LA CREMA DE VINO BLANCO Y AZAFRAN

Parece que muchas veces todos los astros se alinean para que uno no pueda hacer las cosas como realmente le gusta, así que tras pasar una gripe, de esas de varios días en cama, como cuando éramos pequeños y una mudanza con una nueva cocina y un montón de chismes por desembalar, así que toca volver a encender los fogones y traeros recetas al blog. Hoy os propongo un delicioso primer plato, para disfrutar y acompañar con una buena copita de vino blanco.

INGREDIENTES

Un buen puñado de mejillones limpios.

100 ml. de nata para cocinar.

1/2 Cebolla.

1/2 Tomate maduro.

1 Vaso de vino blanco.

Unas hebras de azafrán.

Aceite de oliva.

Sal y pimienta.

Perejil fresco.

1. Lavamos y limpiamos bien los mejillones, quitando todas las impurezas que tengan. En una sartén, sofreímos la cebolla picada muy fina. Una vez que comience a dorarse, añadimos el tomate picado también muy fino y freímos un par de minutos más.
2. Añadimos el vino junto con el azafrán y la nata para cocinar, salpimentamos. Removemos bien y dejamos reducir hasta obtener una salsa espesa. Salpimentamos.
3. Cocemos los mejillones al vapor en una olla, desechando los que no se abran o queden feos. Servimos con la salsa y un poco de perejil picado fresco.

Para abrir los mejillones, yo los pongo en una olla con un dedo de agua, un chorrito de vino blanco, una pizca de sal y un ajo. El caldo que queda una vez abiertos, lo podemos añadir a la salsa y dejarlo reducir con el resto de ingredientes antes de incorporar sobre los mejillones, le aportará un toque estupendo a la salsa y al plato.

Como veis es un plato muy sencillo, cuyo único secreto es la utilización de ingredientes siempre frescos y utensilios de calidad, yo lo he realizado con mi sarten de Buyer, una adquisición con la que cada vez estoy más contento. Muchas veces el buen resultado de un plato radica en una buena elección de los materiales que vamos a utilizar.