TAJINE DE POLLO CON ACEITUNAS Y LIMON EN CONSERVA

Hoy vamos con una receta marroquí, y es que no hay nada como viajar a través de los sabores y los aromas sin salir de casa. Hoy solo nos harán falta unos cuantos ingredientes para, casi sin darnos cuenta, transportarnos al país de las especias. Si os gusta la cocina mediterránea, no os podéis perder esta receta que contiene un ingrediente común de todas sus culturas y que se utiliza en la gastronomía desde la antigüedad, las aceitunas, ingrediente que en casa nunca falta. Os animo a preparar este plato sencillo, fácil y de una cantidad de sensaciones y sabores que os van a enamorar.

INGREDIENTES

1/2 Pollo troceado.
La piel a tiras de un limón en conserva.
Un puñado de aceitunas verdes deshuesadas.
1 Cucharadita de pimentón.
1 Cucharadita de canela.
1 Cucharadita de comino en polvo.
1 Cucharadita de cúrcuma.
1/2 cucharadita de cayena en polvo.
Unas hebras de azafrán.
2 Cucharadas de aceite.
1 Cebolla cortada en aros.
2 Ajos picados.
2 cm de jengibre rallado.
1 Cucharada de harissa.
1 Cucharada de miel.
Perejil y cilantro frescos.
1 Taza de caldo o agua.
Sémola de trigo para acompañar.

1- Ponemos unas horas antes a macerar el pollo con el pimentón, la canela, el comino, la cayena, una pizca de sal y la cúrcuma. Colocamos una sartén a fuego medio con el aceite y sofreímos el pollo hasta que este quede bien dorado. Lo reservamos.

2- Bajamos el fuego,  incorporamos la cebolla y vamos removiendo hasta que comience a dorarse, añadimos entonces el jengibre y el ajo, seguimos friendo sin parar de remover durante un minuto. Añadimos entonces el pollo, el caldo, las aceitunas, la corteza del limón, la harissa y la miel. Dejamos a fuego lento unos 30- 40 min.

3- Pasado este tiempo, retiramos parte del caldo y preparamos con él la sémola. Picamos el perejil y el cilantro, lo incorporamos a la sartén y mezclamos nuestra carne con él. Acompañamos nuestro tagine con la sémola.

Este es uno de los tajines más típicos de la cocina marroquí, una delicia que podemos preparar en casa con unos pocos ingredientes y que posee un intenso aroma aportado por el limón y todas las especias, tanto secas como frescas que lleva este plato; la cúrcuma, el azafrán o la canela harán de vuestra cocina un lugar super especial mientras el guiso se cocina. Os aseguro que el viaje sensorial va a estar garantizado.

Este plato muy completo y nutritivo, contamos por un lado con la proteína del pollo, las vitaminas cítricas del limón y todas las propiedades de la aceituna como fuente natural de aceite de oliva e ingrediente imprescindible en nuestra cocina. Cuentan con pocas calorías, son muy nutritivas y nos aportan un gran número de vitaminas y minerales. Como os decía al principio, en casa nunca faltan y son un ingrediente esencial en mi cocina.

Que la larga lista de ingredientes no suponga una pega a la hora de prepararlo, ya que en el fondo no son tantos como parece y seguro que los encontramos casi todos por casa. En caso de no ser así, es una ocasión estupenda para  completar el especiero.

En cuanto a las aceitunas, en España encontramos un montón de variedades, pero las principales son: Manzanilla, Gordal, Hojiblanca y Cacereña. Podemos usar la variedad que más nos guste, pero siempre sin hueso, que son las mejores para cocinar y será incomodo tener que quitarlo mientras comemos, al igual que irán sin rellenar, para que los sabores no alteren el plato.

El tajín es un recipiente típico de la cocina árabe que funciona a modo de una especie de horno a través de la campana que cierra la base, haciendo que los aromas y sabores se impregnen y giren por todo el guiso, dando ese toque tan característico de este tipo de platos. En caso de no tejer un tajín para cocinar se puede realizar en una olla, mejor si es de hierro y con tapa, siempre cociendo a fuego lento.

Si os cuesta encontrar limones en conserva los podéis realizar vosotros mismos, son fáciles de preparar, pero mínimo necesitaréis un mes de antelación. La harissa es más difícil de preparar, pero seguro que dando una vuelta por el barrio más exótico de vuestra ciudad la encontráis en alguna tienda árabe (donde podréis adquirir también el limón y las especias que os falten)

Si queremos podemos acompañar este plato de un pan plano marroquí (o pitas) acompañadas de hummus o de un paté de aceitunas negras. Sin duda hará que el plato sea mucho más completo y saciante.

¡Espero que os guste y os animéis a prepararlo!