MERMELADA DE TOMATE

Estamos en temporada propicia para adquirir buenos tomates, así que a demás de estar todo el día bebiendo gazpacho bien fresquito, aprovecho para preparar ricas mermeladas y confituras para guardar y poder disfrutar el resto del año. Son tan fáciles de preparar y el resultado es tan bueno, que merece la pena dedicarles un rato.

 Esta de tomate es ideal para tomar tanto de manera dulce con unas tostadas para la merienda o el desayuno, o para acompañar platos salados como carnes, incluso para una buena tabla de quesos.

INGREDIENTES

1 kilo de tomate( pelado y despepitado)

400 gr. de azúcar.

El zumo de un limón.

1 vaina de vainilla.

1-      Ponemos en una olla a fuego medio los tomates pelados, despepitados y cortados en taquitos, junto con el azúcar y el zumo del limón.

2-      Partimos a lo largo la vaina de vainilla, y con ayuda de un cuchillo, sacamos la pulpa. Lo troceamos todo y añadimos al tomate. Removemos bien.

3-      Cocemos hasta conseguir la textura deseada (unos 50 mim.) removiendo de vez en cuando.

  Con la cantidad que nos sale podremos envasar y obtendremos unos buenos tarros de mermelada (para guardar o para regalar)  Para ello, cogeremos unos tarros de cristal, los herviremos junto con sus tapaderas en una olla con agua y los dejaremos enfriar. Rellenaremos con la mermelada caliente, los taparemos y pondremos boca abajo envueltos en trapos de cocina, dejaremos enfriar y listo.

Es muy sencilla de preparar, simplemente hay que estar pendiente de la olla para que no se nos pase el punto y quede demasiado espesa, por lo demás, casi que se hace sola.

Agradecer enormemente a David de La Cocina Pistacho y a Ruth de Cakes Cookies and Muffins por la receta y ayuda proporcionada.