Siempre vi febrero como un gran obstáculo en el calendario,
nunca me gustó, tan frío y hostil, sin embargo a la misma vez, es el mes de los
enamorados (dicen que viene de un invento consumista para que los
establecimientos pudieran sobrellevar la cuesta de enero, pero yo estoy
convencido que era una forma de darle alegría y calor a tan austero mes del
año) Febrero trae consigo (como casi cualquier mes, la verdad) bastantes cosas
que celebrar, y siempre hay algún amigo que te recuerda que, tras un año, es el
momento de sumar otro (o de restar en este caso). Y que mejor manera para
festejarlo que con una gran tarta. He de decir que fue la primera (espero que
de muchas) y que el resultado fue asombrosamente delicioso, así que sin más
preámbulos.. Feliz Cumpleaños Angelito! Para la ocasión nos hacemos con una vajilla buena y antigua (y si no la tenemos, nos la agenciamos*, pero la ocasión lo merece).
INGREDIENTES
100 gr. de harina
100 gr. de azúcar blanco
100 gr. de azúcar glas.
150 gr. de mantequilla
6 huevos
400 gr. de chocolate al 70% de cacao
10 gr. de levadura
Mermelada de albaricoque
250 gr de nata para cocinar
200 ml de agua
50 ml de ron
200 ml de azucar
½ hoja de gelatina.
La receta es para un molde de 26 cm . Se pueden duplicar o
reducir las cantidades para adaptarlas a nuestras necesidades.
1- Ponemos
a fundir 150gr. de chocolate (si lo hacemos en el microondas añadiremos un
poquito de agua y removeremos cada pocos segundos para que no se nos queme).
Mezclamos el azúcar glas con 100 gr. de mantequilla a temperatura ambiente con
la batidora y añadimos el chocolate fundido, seguimos batiendo. Añadimos las
yemas una a una removiendo cada vez, hasta que esté toda la masa bien mezclada.
A continuación montamos las claras en punto de nieve junto con el azúcar
blanco. Una vez montadas las vamos añadiendo poco a poco y vamos mezclando la
masa con una espátula de fuera hacia dentro) como si estuviésemos envolviendo
el centro de la masa) En un bol mezclamos la harina, la levadura y una pizca de
sal, mezclamos bien y tamizamos sobre la masa mientras vamos removiendo poco a
poco para que todos los ingredientes queden bien mezclados. Preparamos el molde
con un poco de mantequilla y vertemos la masa. Ponemos el horno a precalentar a
150º. Horneamos unos 45 minutos, hasta que al pincharla con un cuchillo este
salga seco.
2- Una
vez listo, desmoldamos y dejamos enfriar un poco. Damos la vuelta (de forma que
la parte lisa de la base quede como tapa de la tarta) y cortamos por la mitad,
para ello nos ayudamos de un cuchillo de sierra cortando un poquito por los
lados a todo alrededor y luego rebanamos con uno más largo, tipo jamonero. Separamos
las dos partes. Preparamos un almíbar con 200ml. de agua, 5 ml. de ron y 200
ml. de azúcar, para ello, ponemos los ingredientes a fuego lento durante 15
minutos removiendo de vez en cuando, cuando espese, bañamos las dos capas de
bizcocho. Batimos la mermelada y
extendemos una capa fina por la base del bizcocho, colocamos la otra media base
encima y cerramos.
3- Para
la cobertura de chocolate, ponemos a calentar la nata, con 15gr. de agua y
media hoja de gelatina, cuando comience a hervir, apartamos del fuego y
añadimos 250gr. de chocolate en trocitos pequeños y mezclamos bien con ayuda de
unas varillas. Una vez mezclado todo añadimos 50gr. de mantequilla y seguimos
removiendo hasta que todo quede bien mezclado.
4- Colocamos
la tarta sobre una rejilla y vertemos poco a poco la cobertura, de forma que
quede bien cubierta y el sobrante caiga bajo la rejilla. Decoramos al gusto y dejamos enfriar,
cubrimos y metemos al frigo. Esta tarta está mucho mejor de un día para otro,
así que.. a disfrutar todos de la
Sacher !!!
Es curioso que con lo maravillosas que son las tartas, la
gran mayoría solo las asociemos a celebraciones y buenos momentos, creo que los
peores ratos serían mucho más llevaderos con
un buen trozo de pastel, así que esta semana pienso realizar mi segunda
tarta Sacher y afrontar los problemas como se debe, dulcemente y con una buena
tarta de chocolate!!!
Qué pinta ................
ResponderEliminarTú sabes que esto lo pagarás en el infierno....
ResponderEliminarSi es el precio que hay que pagar por una tarta así.. que le vamos a hacer!!!!! jejeee..
ResponderEliminarHola, Raúl! GRACIAS por tu coment. así he podido conocer tu estupéndo blog! estoy dando una vuelta por el y como soy muy chocolatera no me he podido resistir a ésta dulce tentación jijii. Me encanta tu reflexión, es cierto que solemos hacer tartas para celebrar buenos momentos, pero tambien nos vendria fenomenal hacerlas cuando estamos de bajitos de animo.
ResponderEliminarYo, tambien me quedo por aquí para seguirte.
Besitosss.
Me alegra mucho que te guste y que te quedes, un placer y encantado :) !!!!
ResponderEliminarQué ganas tenía de encontrar una buena receta de Sacher...Gracias
ResponderEliminarUn beso
Paloma
www.chocolatmalaga.blogspot.com
Ahora te contare que el primer día que me llevaba la receta no me di cuenta y rellene el comentario, muy feliz de que esta receta no la tenia publicada en mi blog, jaaaaaaa y punto de darle al publicar, caí que NO podía decir ni muuuu ¡¡¡¡ jaaaa que pachá de reír me di yo sola ¡¡¡¡¡
ResponderEliminarLa verdad es que la SAcher era un asignatura pendiente en mi blog y gracias a ti la tengo, tu receta es exquisita pero la gelatina me tira para atrás, es que soy my maniática.
Estoy encantada de haberte asaltado y robado y encima ni me denuncias ¡¡¡¡
Gracias por tu amistad me encanto conocerte.
bsss desde Almeria